El Taller de Narrativas Pedagógicas se
dará por primera vez al alero del Museo de la Educación Gabriela
Mistral, a partir del martes 18 de marzo de 2014. Está dirigido a
profesores y profesoras en ejercicio, de todos los niveles y
especialidades. Consistirá en la realización de una sesión semanal todos
los días martes a las 18.30 hrs en el Museo de la Educación, a lo largo
de 9 semanas.
El taller se basa en la metodología llamada
"Documentación Narrativa de Experiencias Pedagógicas", trabajada en
países como Argentina, Colombia y Brasil, pero poco desarrollada en
Chile. Personalmente la aprendí en el curso de "Formación de
Coordinadores de Talleres de Documentación Narrativa de Experiencias
Pedagógicas", impartido por la Universidad de Buenos Aires en conjunto
con la Universidad de Quilmes (Argentina) y dirigido por Cecilia Tanoni,
entre abril y mayo de 2013.
Esta metodología es una
invitación a escribir sobre nuestras experiencias como docentes. Se trata de un procedimiento guiado en el cual se incita a
los profesores a escribir sobre un tema: un logro profesional,
dificultades en los procesos de enseñanza, visiones sobre la vocación y
sobre la profesión docente, entre muchos otros temas tan variados como
la experiencia misma de ser profesor. Una vez que el docente cree un
primer texto, éste será compartido con sus pares y se dará una
conversación sobre el escrito a partir de la cual el docente-autor
deberá modificar su texto en base a los comentarios, ideas y preguntas
que hayan surgido en el colectivo. Se procederá de esa manera hasta
llegar a una versión 3 del texto original.
La Documentación
Narrativa de Experiencias Pedagógicas propone este procedimiento como
una forma de indagar en la práctica de los profesores, en sus
percepciones de sí y de la educación. La intención de esta metodología
es hacer emerger a través de la escritura el saber que los propios
maestros construyen sobre su oficio en el día a día. Se espera que
mediante la textualización de sus problemas, reflexiones e historias
sistematicen lo que saben sobre "el ser profesor". Por último, a medida
que se vayan transformando los textos -mutados a partir de los
comentarios de sus pares- se busca que el docente-autor modifique (o
consolide, o revise, o depure) lo que sabe y lo que quiere de sí y de su
rol en la educación chilena.
El procedimiento empleado
es, entonces, un doble ejercicio: por una parte, construir saber sobre
la escuela, pero hacerlo desde los docentes, a ras
de la experiencia del profesor. El profesor es acá un autor habilitado
para decir la docencia. Por otra parte, el hecho que sea un proceso de
discusión colectiva genera un saber producido al interior de la pequeña
comunidad del taller y no de manera individual y aislada. Por eso,
los textos y los saberes que éste contenga podrán estar constituidos por
reflexiones subjetivas, emociones, decepciones. No buscamos hacer
relatos desprovistos de experiencias para validarlos. Todo lo contrario,
en este caso el texto se valida justamente porque fue una vivencia
real, sentida, experimentada y re-pensada por un sujeto de carne y hueso.
El
taller tiene un sentido que no busca esconder su
intencionalidad política: es política porque hace público mediante el
texto un sentir personal y mucha veces invisibilizado. Es decir, lo que
antes era estrictamente individual, pasa a ser tema de discusión
colectiva y suele ocurrir que el docente reconoce en el relato del otro
una experiencia que también ha vivido. Es político también porque
plantea la producción de saber pedagógico recuperando lo que sabe el
docente, entendiéndolo como un sujeto que conoce su quehacer, que tiene
ideas sobre él y que por lo tanto es un agente activo y transformador y
no
un mero ejecutor del curriculum.
Como
coordinadora del taller y con el apoyo del Museo de la Educación,
invito a profesores y profesoras a escribir en este taller sobre sus
experiencias en la docencia, a hacerse preguntas, a reconocerse en el
otro y a constituir
una instancia -fuera de las que provee la escuela, como el consejo de
profesores- que busca poner a dialogar a los docentes, registrar sus
experiencias y a revisar su propio quehacer.
Los
profesores son sujetos atravesados por la escritura: ellos la enseñan,
la propagan, y la totalidad de sus prácticas se "deben" registrar de
manera escrita (en el libro de clases, las notas, informes,
comunicaciones y planificaciones), pero la pregunta a la que invitamos
es: ¿cuánto usamos la escritura para decir lo que (nos) pasa y no lo que
(nos) "debe" pasar en el aula?
La pregunta se enlaza con
dos convicciones: la primera, que todos podemos escribir; la segunda,
que quien escribe su historia está en condiciones de transformarla.
Esta
es la invitación, aunque lo que pase en el taller de seguro será algo
inesperado, tan inmanejable como la experiencia del profesor, como lo
que pasa en el aula y como la educación misma. Sin embargo, haremos de
esa sorpresa que nos deparen los textos una oportunidad para mirarnos,
escribirnos y cambiar.
El taller tiene cupos limitados y es completamente gratuito.
Recibiremos sus preguntas al correo: tallernarrativaspedagogicas@ gmail.com o a través del Facebook https://www.facebook.com/ tallernarrativaspedagogicas
Belén Fernández
Marzo de 2014, Santiago de Chile
O assunto é muito importante. Interessa-me participar.
ResponderEliminarTodas sus preguntas pueden enviarlas a tallernarrativaspedagogicas@gmail.com
ResponderEliminar